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Diván de poetisas árabes contemporáneas.

Diván de poetisas árabes contemporáneas
DIARIO DE ALMERÍA. 
SALÓN DE LECTURA POR JOSÉ ANTONIO SANTANO


Es cierto que todos los regalos son siempre bienvenidos. Pero hay ocasiones en que son, además de bienvenidos, especiales. Es el caso de este libro que ahora muestro en este singular escaparate: “Diván de poetisas árabes contemporáneas”. Y es un regalo especial por dos razones: por quien me lo obsequia y por su temática. No es fácil hallar en el mercado editorial un libro de estas características, menos aún cuando sus protagonistas son mujeres árabes, y, además, poetisas. No me negarán que no tiene la cosa enjundia. Hay estar hecho de una materia especial para atreverse a reconocer públicamente la integración de la mujer, a más árabe, en el cerrado mundo de la poesía. Un acto revolucionario si nos atenemos a los hechos que vienen sucediéndose en la sociedad árabe desde tiempo inmemorial. Mostrar el lado femenino de la literatura árabe, y en especial el de la poesía es merecedor de todo encomio. A nadie se le escapa la dificultad para afrontar un trabajo de estas características, y es de justicia reconocer esta labor, precisamente en la persona de Jaafar Al Aluni, un hombre, que no, curiosamente, una mujer, lo que añade más valor si cabe a esta publicación. En palabras de Ibn Arabí «Todo lugar que no acepta lo femenino es estéril, no cuenta» y el poeta Adonis, autor de la presentación de este libro añade: «la masculinidad que anula la feminidad se anula a sí misma, y esta es la situación actual de las sociedades árabes e islámicas: están anuladas, tanto en lo masculino como en lo femenino. La mujer en estas sociedades es un objeto religioso codificado, enjaulada en lo lícito y lo ilícito, es un ser sin rostro, y todo ser que carece de rostro, carece de identidad», y concluye, refiriéndose a esta antología: «En esta selección de poesía femenina árabe, el lector encontrará diversas maneras en las que la mujer poeta se expresa a sí misma, expresa su libre feminidad, su cuerpo, su relación con el mundo y con las cosas, y, sobre todo, su relación la lengua árabe femenina, la cual, en sí misma, necesita la libertad y liberarse de lo masculino que dirige la tierra en nombre del Cielo». 
DIVÁN DE POETISAS ÁRABES CONTEMPORÁNEAS

Por su parte, Jaafar Al Aluni, autor de esta edición y traducción nos acerca a la poesía árabe escrita por mujeres mediado el siglo XX, años después de lo que vendría en llamarse “el despertar árabe”. Será entonces cuando la poesía árabe femenina comience su andadura y su presencia sea más activa, aunque dadas las circunstancias sociales del mundo árabe no sean las mejores para una verdadera difusión del quehacer poético de las mujeres árabes, relegadas y silenciadas sistemáticamente. Diez son las poetas seleccionadas por Aluni para este “Diván”, diez voces diferentes que abren el camino a un mayor conocimiento de la poesía árabe. Fadwa Tuqán y Názik Al-Malaika inician el movimiento poético femenino y son las primeras en introducir cambios en la tradición poética a partir de los años cincuenta. Para Aluni los años sesenta representarán la entrada de la modernidad a través de la revista “Sh’ir”, con poetas como Saniya Saleh y Ámal Yarrah. El papel de la libertad de la mujer y su papel en la sociedad es asumido poéticamente por las poetas Lamía Abbás Amara, Suad Al-Sabah y Fawzía Abú Jáled, en los años setenta y ochenta. Concluye su selección Aluni con la representación de poetas pertenecientes a los países orientales, como la libanesa Souzanne Alaywan, de los occidentales la marroquí Widad Benmusa y de los países del Golfo a la yemení Huda Ali Iblán. Una muestra tan heterogénea como acertada si nos atenemos a los propios textos que avalan la trayectoria poética de cada una de las poetas seleccionadas por Aluni. Como prueba de lo dicho sean los versos de las poetas representativas de las etapas expresadas anteriormente. De Tuqán, del poema “Tu nombre”: «¿Tu nombre? / Oh suspiro de flor que exhala en el rocío de la palabra, / ¿tu nombre? / Oh luz de madrugada que apareciste / cuando caí en la oscuridad del camino. / Oh melodía que me levanta y me acuesta con su armonía», de Saniya Saleh, del poema “Patria”: «Mi patria es mi sueño, / cabeza y corazón / ardiente y palpitante. / Mi patria son los caminos aislados, / la tumba y las salas de espera»; de la tercera etapa seleccionamos a Fawzía Abú Jáled y los contundentes versos de “El poema del agua”: «Sumergió sus dedos en el desierto, / y con el agua del espejismo escribió un poema» y de la última etapa sean estos versos de la marroquí Benmusa, donde el silencio es el eje de la vida: «El viento del silencio / penetra mi cuerpo / heme aquí celebrando / una soledad distinta…». No cabe duda que este libro “Diván de poetisas árabes contemporáneas” marca un antes y un después, que es una referencia clara de la poesía femenina árabe, y que todo él trasluce verdad e inteligencia, ética y estética para un tiempo nuevo en el que la mujer no puede seguir representando “lo estéril”, sino todo lo contrario, el fruto de una manera diferente de entender el mundo, también de construirlo.
.
JAAFAR AL ALUNI



Título: Diván de poetisas árabes contemporáneas
Autor: Jaafar Al Aluni
Ediciones del oriente y del mediterráneo   (Madrid, 2016)

Diván de poetisas árabes contemporáneas.

Diván de poetisas árabes contemporáneas
DIARIO DE ALMERÍA. 
SALÓN DE LECTURA POR JOSÉ ANTONIO SANTANO


Es cierto que todos los regalos son siempre bienvenidos. Pero hay ocasiones en que son, además de bienvenidos, especiales. Es el caso de este libro que ahora muestro en este singular escaparate: “Diván de poetisas árabes contemporáneas”. Y es un regalo especial por dos razones: por quien me lo obsequia y por su temática. No es fácil hallar en el mercado editorial un libro de estas características, menos aún cuando sus protagonistas son mujeres árabes, y, además, poetisas. No me negarán que no tiene la cosa enjundia. Hay estar hecho de una materia especial para atreverse a reconocer públicamente la integración de la mujer, a más árabe, en el cerrado mundo de la poesía. Un acto revolucionario si nos atenemos a los hechos que vienen sucediéndose en la sociedad árabe desde tiempo inmemorial. Mostrar el lado femenino de la literatura árabe, y en especial el de la poesía es merecedor de todo encomio. A nadie se le escapa la dificultad para afrontar un trabajo de estas características, y es de justicia reconocer esta labor, precisamente en la persona de Jaafar Al Aluni, un hombre, que no, curiosamente, una mujer, lo que añade más valor si cabe a esta publicación. En palabras de Ibn Arabí «Todo lugar que no acepta lo femenino es estéril, no cuenta» y el poeta Adonis, autor de la presentación de este libro añade: «la masculinidad que anula la feminidad se anula a sí misma, y esta es la situación actual de las sociedades árabes e islámicas: están anuladas, tanto en lo masculino como en lo femenino. La mujer en estas sociedades es un objeto religioso codificado, enjaulada en lo lícito y lo ilícito, es un ser sin rostro, y todo ser que carece de rostro, carece de identidad», y concluye, refiriéndose a esta antología: «En esta selección de poesía femenina árabe, el lector encontrará diversas maneras en las que la mujer poeta se expresa a sí misma, expresa su libre feminidad, su cuerpo, su relación con el mundo y con las cosas, y, sobre todo, su relación la lengua árabe femenina, la cual, en sí misma, necesita la libertad y liberarse de lo masculino que dirige la tierra en nombre del Cielo». 
DIVÁN DE POETISAS ÁRABES CONTEMPORÁNEAS

Por su parte, Jaafar Al Aluni, autor de esta edición y traducción nos acerca a la poesía árabe escrita por mujeres mediado el siglo XX, años después de lo que vendría en llamarse “el despertar árabe”. Será entonces cuando la poesía árabe femenina comience su andadura y su presencia sea más activa, aunque dadas las circunstancias sociales del mundo árabe no sean las mejores para una verdadera difusión del quehacer poético de las mujeres árabes, relegadas y silenciadas sistemáticamente. Diez son las poetas seleccionadas por Aluni para este “Diván”, diez voces diferentes que abren el camino a un mayor conocimiento de la poesía árabe. Fadwa Tuqán y Názik Al-Malaika inician el movimiento poético femenino y son las primeras en introducir cambios en la tradición poética a partir de los años cincuenta. Para Aluni los años sesenta representarán la entrada de la modernidad a través de la revista “Sh’ir”, con poetas como Saniya Saleh y Ámal Yarrah. El papel de la libertad de la mujer y su papel en la sociedad es asumido poéticamente por las poetas Lamía Abbás Amara, Suad Al-Sabah y Fawzía Abú Jáled, en los años setenta y ochenta. Concluye su selección Aluni con la representación de poetas pertenecientes a los países orientales, como la libanesa Souzanne Alaywan, de los occidentales la marroquí Widad Benmusa y de los países del Golfo a la yemení Huda Ali Iblán. Una muestra tan heterogénea como acertada si nos atenemos a los propios textos que avalan la trayectoria poética de cada una de las poetas seleccionadas por Aluni. Como prueba de lo dicho sean los versos de las poetas representativas de las etapas expresadas anteriormente. De Tuqán, del poema “Tu nombre”: «¿Tu nombre? / Oh suspiro de flor que exhala en el rocío de la palabra, / ¿tu nombre? / Oh luz de madrugada que apareciste / cuando caí en la oscuridad del camino. / Oh melodía que me levanta y me acuesta con su armonía», de Saniya Saleh, del poema “Patria”: «Mi patria es mi sueño, / cabeza y corazón / ardiente y palpitante. / Mi patria son los caminos aislados, / la tumba y las salas de espera»; de la tercera etapa seleccionamos a Fawzía Abú Jáled y los contundentes versos de “El poema del agua”: «Sumergió sus dedos en el desierto, / y con el agua del espejismo escribió un poema» y de la última etapa sean estos versos de la marroquí Benmusa, donde el silencio es el eje de la vida: «El viento del silencio / penetra mi cuerpo / heme aquí celebrando / una soledad distinta…». No cabe duda que este libro “Diván de poetisas árabes contemporáneas” marca un antes y un después, que es una referencia clara de la poesía femenina árabe, y que todo él trasluce verdad e inteligencia, ética y estética para un tiempo nuevo en el que la mujer no puede seguir representando “lo estéril”, sino todo lo contrario, el fruto de una manera diferente de entender el mundo, también de construirlo.
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JAAFAR AL ALUNI



Título: Diván de poetisas árabes contemporáneas
Autor: Jaafar Al Aluni
Ediciones del oriente y del mediterráneo   (Madrid, 2016)

UNA VERDAD EXTRAÑA.


SALÓN DE LECTURA _____________________ José Antonio Santano


José Antonio Santano


UNA VERDAD EXTRAÑA. (POESÍA 1974-2018)


Si de aconsejar se tratara y teniendo en cuenta la falta de rigor con el que nos sorprenden algunos escaparates de la literatura española actual, no sería complicado dar con una relación suficiente de títulos para esta etapa veraniega, en la que, poco a poco, se va asentando la costumbre de leer, aunque sean, en su mayoría, libros insustanciales con los que las grandes editoriales, llevadas por el más puro sentido mercantilista (promociones salvajes en radio, prensa y televisión), seducen a los eventuales lectores. Para esta ocasión, la recomendación, atendiendo al exclusivo sello de calidad, tendrá su plasmación en un libro que, con toda seguridad no defraudará al lector de poesía, sea principiante o ya avezado en la materia. Se trata de la segunda edición de la obra corregida y aumentada “Una verdad extraña (Poesía 1974-2018)”, del poeta de Jódar (Jaén), Manuel Ruiz Amezcua, cuyo estudio, de casi 200 páginas, ha corrido a cargo del profesor de Literatura Española, en la Universidad de Sevilla, Carlos Peinado Elliot. Queda publicada así, en un esfuerzo ingente por parte del sello editorial Comares, la obra completa –hasta ahora-, corregida y aumentada del poeta Manuel Ruiz Amezcua. Si nos atuviéramos a algunas de las opiniones versadas sobre la trayectoria y la voz poética de Ruiz Amezcua, tendríamos que detenernos, obligatoriamente, en la de su paisano Antonio Muñoz Molina, cuando dice: «Manuel Ruiz Amezcua ha realizado una carrera literaria tan tenaz y rigurosa como desasistida de cualquier clase de reconocimiento público. Va siendo hora de que sea escuchado. 


Es dueño de una voz y de una obra poética que deben ocupar cuanto antes el sitio que les corresponde en el repertorio público de nuestra literatura», y también, por resumir dado el gran número de críticos y poetas que han reseñado la obra de Ruiz Amezcua, la del premio Nobel, José Saramago, que llegó a escribir: «Una novela nunca da la sensación de poder levantar el mundo. La poesía sí. Como esta de Ruiz Amezcua». Dos opiniones suficientemente relevantes, sin quitar importancia a otras que no han sino reconocer el trabajo y la calidad poética de la obra de Ruiz Amezcua. En este volumen, “Una verdad extraña”, Carlos Peinado Elliot recorre de principio a fin la obra de Ruiz Amezcua contenida en sus más de 800 páginas, y lo hace desde el análisis y la reflexión profunda, ahondando en aquellos elementos propios y caracterizadores de su poética, olvidada y silenciada durante un tiempo en el que la poesía era concebida como un club de amigos al que solo podían pertenecer algunos elegidos, y no precisamente por su calidad y su aportación a la poesía del siglo XX, sino por la relación más o menos interesada de amistad o, en su defecto, política. Fueron aquellos, años de sequía para la poesía española, en la que solo cabía una única tendencia, una corriente que lo absorbía todo, incluido el sector editorial. En estas circunstancias, “la otra poesía” no tenía cabida, fue denostada o en el mejor de los casos silenciada. A esa “otra poesía” pertenecía por derecho propio Ruiz Amezcua, porque tampoco quiso nunca que le relacionaran con la moda poética de aquellos años, tan laxa y plana para él. Hubo de pasar el tiempo, de sucederse los años para que viniera el reconocimiento a su trabajo poético, como ahora se puede constatar en este libro. «La revelación del mal y de la injusticia», está en el origen de su poesía, y añade el propio autor: «Las palabras también consuelan. Y redimen. La poesía duele, pero siempre cura. Hay marcas que no se borran y las palabras nos sirven para convertirlas en un mundo distinto, en un viaje distinto. Un viaje de por vida. Un viaje al fin de la noche buscando la claridad del día». En esto consiste el hecho mágico de descubrir la luz en la oscuridad misma, un viaje al interior del silencio y capaz de revelar la luz es el acto poético por excelencia, la esencia de la poesía en su camino hacia la transformación del mundo (interior y exterior), en el cual el ser humano es el centro. Claro que la poesía redime y sana, ese ha sido siempre el principio motor de Ruiz Amezcua que, aún frente a las vicisitudes y obstáculos que se interpusieron en su camino, siempre supo cuál era el camino. En esa lucha del hombre con el mundo siempre estuvo Ruiz Amezcua, con la palabra exacta, el lenguaje preciso que sangra por las venas del poeta hasta convertir lo vivido en el único edén posible. Todo esto y más hallamos en la poesía de Ruiz Amezcua que parte de “Humana raíz”(1974) y llega hasta “Palabras clandestinas” (2015), con el añadido de algunos poemas inéditos. Un trabajo de análisis recogido en casi 150 páginas escritas por el profesor Carlos Peinado, desde la objetividad del conocimiento de su poesía y con la brillantez de su palabra y pensamiento, para quien la obra del poeta es un continuo descender a uno mismo para rebelarse luego ferozmente contra sí mismo. “Una verdad extraña (Poesía 1974-2018)” contiene lo mejor del gran poeta que es Ruiz Amezcua, que es como decir de lo mejor del panorama actual de la poesía española.

Manuel Ruiz Amezcua


Título: Una verdad extraña
(Poesía 1974-2018)
Autor: Manuel Ruiz Amezcua
Edita: Comares (Granada, 2018)


UNA VERDAD EXTRAÑA.


SALÓN DE LECTURA _____________________ José Antonio Santano


José Antonio Santano


UNA VERDAD EXTRAÑA. (POESÍA 1974-2018)


Si de aconsejar se tratara y teniendo en cuenta la falta de rigor con el que nos sorprenden algunos escaparates de la literatura española actual, no sería complicado dar con una relación suficiente de títulos para esta etapa veraniega, en la que, poco a poco, se va asentando la costumbre de leer, aunque sean, en su mayoría, libros insustanciales con los que las grandes editoriales, llevadas por el más puro sentido mercantilista (promociones salvajes en radio, prensa y televisión), seducen a los eventuales lectores. Para esta ocasión, la recomendación, atendiendo al exclusivo sello de calidad, tendrá su plasmación en un libro que, con toda seguridad no defraudará al lector de poesía, sea principiante o ya avezado en la materia. Se trata de la segunda edición de la obra corregida y aumentada “Una verdad extraña (Poesía 1974-2018)”, del poeta de Jódar (Jaén), Manuel Ruiz Amezcua, cuyo estudio, de casi 200 páginas, ha corrido a cargo del profesor de Literatura Española, en la Universidad de Sevilla, Carlos Peinado Elliot. Queda publicada así, en un esfuerzo ingente por parte del sello editorial Comares, la obra completa –hasta ahora-, corregida y aumentada del poeta Manuel Ruiz Amezcua. Si nos atuviéramos a algunas de las opiniones versadas sobre la trayectoria y la voz poética de Ruiz Amezcua, tendríamos que detenernos, obligatoriamente, en la de su paisano Antonio Muñoz Molina, cuando dice: «Manuel Ruiz Amezcua ha realizado una carrera literaria tan tenaz y rigurosa como desasistida de cualquier clase de reconocimiento público. Va siendo hora de que sea escuchado. 


Es dueño de una voz y de una obra poética que deben ocupar cuanto antes el sitio que les corresponde en el repertorio público de nuestra literatura», y también, por resumir dado el gran número de críticos y poetas que han reseñado la obra de Ruiz Amezcua, la del premio Nobel, José Saramago, que llegó a escribir: «Una novela nunca da la sensación de poder levantar el mundo. La poesía sí. Como esta de Ruiz Amezcua». Dos opiniones suficientemente relevantes, sin quitar importancia a otras que no han sino reconocer el trabajo y la calidad poética de la obra de Ruiz Amezcua. En este volumen, “Una verdad extraña”, Carlos Peinado Elliot recorre de principio a fin la obra de Ruiz Amezcua contenida en sus más de 800 páginas, y lo hace desde el análisis y la reflexión profunda, ahondando en aquellos elementos propios y caracterizadores de su poética, olvidada y silenciada durante un tiempo en el que la poesía era concebida como un club de amigos al que solo podían pertenecer algunos elegidos, y no precisamente por su calidad y su aportación a la poesía del siglo XX, sino por la relación más o menos interesada de amistad o, en su defecto, política. Fueron aquellos, años de sequía para la poesía española, en la que solo cabía una única tendencia, una corriente que lo absorbía todo, incluido el sector editorial. En estas circunstancias, “la otra poesía” no tenía cabida, fue denostada o en el mejor de los casos silenciada. A esa “otra poesía” pertenecía por derecho propio Ruiz Amezcua, porque tampoco quiso nunca que le relacionaran con la moda poética de aquellos años, tan laxa y plana para él. Hubo de pasar el tiempo, de sucederse los años para que viniera el reconocimiento a su trabajo poético, como ahora se puede constatar en este libro. «La revelación del mal y de la injusticia», está en el origen de su poesía, y añade el propio autor: «Las palabras también consuelan. Y redimen. La poesía duele, pero siempre cura. Hay marcas que no se borran y las palabras nos sirven para convertirlas en un mundo distinto, en un viaje distinto. Un viaje de por vida. Un viaje al fin de la noche buscando la claridad del día». En esto consiste el hecho mágico de descubrir la luz en la oscuridad misma, un viaje al interior del silencio y capaz de revelar la luz es el acto poético por excelencia, la esencia de la poesía en su camino hacia la transformación del mundo (interior y exterior), en el cual el ser humano es el centro. Claro que la poesía redime y sana, ese ha sido siempre el principio motor de Ruiz Amezcua que, aún frente a las vicisitudes y obstáculos que se interpusieron en su camino, siempre supo cuál era el camino. En esa lucha del hombre con el mundo siempre estuvo Ruiz Amezcua, con la palabra exacta, el lenguaje preciso que sangra por las venas del poeta hasta convertir lo vivido en el único edén posible. Todo esto y más hallamos en la poesía de Ruiz Amezcua que parte de “Humana raíz”(1974) y llega hasta “Palabras clandestinas” (2015), con el añadido de algunos poemas inéditos. Un trabajo de análisis recogido en casi 150 páginas escritas por el profesor Carlos Peinado, desde la objetividad del conocimiento de su poesía y con la brillantez de su palabra y pensamiento, para quien la obra del poeta es un continuo descender a uno mismo para rebelarse luego ferozmente contra sí mismo. “Una verdad extraña (Poesía 1974-2018)” contiene lo mejor del gran poeta que es Ruiz Amezcua, que es como decir de lo mejor del panorama actual de la poesía española.

Manuel Ruiz Amezcua


Título: Una verdad extraña
(Poesía 1974-2018)
Autor: Manuel Ruiz Amezcua
Edita: Comares (Granada, 2018)


ANTOLOGÍA DE POESÍA IBEROAMERICANA ACTUAL.

 Coordinado por Alfonso Berlanga Reyes y José Antonio Santano Serrano. La publicación ha estado al cuidado del sello editorial "Exlibric", de Málaga. La presentación oficial del libro se llevará a cabo durante el XXI Encuentro de Poetas Iberoamericanos a celebrar en Salamanca en el mes de octubre, que se conmemora también los ocho siglos de la fundación de la Universidad de Salamanca.
Los integrantes han nacido entre 1970 y 1985 hasta completar una nómina de 55 autores de diferentes países. Las poetas representadas en la presente antología tienen una presencia destacada, infrecuente en este tipo de publicaciones y con un objetivo, la mujer iberoamericana tiene una voz y una concepción distinta de la expresión poética, una visión del mundo diferente de tal forma que su contribución al panorama poético resulta de trascendental importancia de ahí su presencia especial en esta Antología.
El lector constatará que se incluye la más rica variedad temática, técnica y estilística, como corresponde a una nómina de poetas tan considerable y de procedencia tan diferente.
El índice de autores lo componen:


A
Abril, Juan Carlos (España)
Alonso Cruz, Luis (Perú)
Alonso Sánchez, Diego (Perú)
Alvarado, Javier (Panamá)
Alves Costa, Tiago (Portugal)
B
Belmonte, Luis Enrique (Venezuela)
Blum, Ana Cecilia (Ecuador)
C
Carrión, Ernesto (Ecuador)
Castell, Frank (Cuba)
Cerón, Rocío (México)
Cevallos Perugachi, Javier (Ecuador)
Charry Noriega, Camila (Colombia)
Chávez Casazola, Gabriel (Bolivia)
D
Duarte, Luis Enrique (Nicaragua)
E
Espinosa Guerra, Julio (Chile)
Estrada, Fabricio (Honduras)
Estrada, Lucía (Colombia)
G
Gallo, Paola (Uruguay)
Garcia Pereira, Adriane (Brasil)
García Quintero, Felipe (Colombia)
Gatica Bravo, Marcelo Ismael (Chile)
Ghezzi Solís, Melissa (Perú)
Guerreiro, Sandra (Portugal)
I
Iris, Manuel (México)
López Sandoval, David (España)
Luis Rafael (Cuba)
M
Martínez Clares, José Luis (España)
Martínez Pérsico, Marisa (Argentina)
Masin, Claudia (Argentina)
Méndez, Roxana (El Salvador)
Mendoza, Néstor (Venezuela)
Merino, Ana (España)
Midence, Magdiel (Honduras)
Mills, Alan (Guatemala)
Mussó, Luis Carlos (Ecuador)
Ñ
Ñaupari, Héctor (Perú)
O
Oyuela, Mayra (Honduras)
P
Palomo Pinel, Carmen (España)
Pariso, Valeria (Argentina)392
Parls, Glaem (República Dominicana)
Pastor, Mara (Puerto Rico)
Payeras, Javier (Guatemal)
Pereira, Alberto (Portugal)
Piranesi, Silvia (Costa Rica)
Pólack, Bruno (Perú)
Q
Quevedo Rojas, Aleyda (Ecuador)
R
Rodríguez Leytón, Paura (Bolivia)
Rodríguez Moya, Daniel (España)
S
Santamaría, Gema (Nicaragua)
Secaira Velástegui, Juan (Ecuador)
Solórzano-Alfaro, Gustavo (Costa Rica)
T
Torres, Maggie (Paraguay)
V
Valencia, Ingrid (México)
W
Wolkoff, Gisele Giandoni (Brasil)
Y
Yezzed, Fredy (Colombia)

Completa antología de poesía coordinada por Francisco Alfonso Berlanga Reyes y José Antonio Santano Serrano.

Compra el libro en:

comprar libro en amazon

comprar libro en casa del libro

comprar libro en tienda exlibric

ANTOLOGÍA DE POESÍA IBEROAMERICANA ACTUAL.

 Coordinado por Alfonso Berlanga Reyes y José Antonio Santano Serrano. La publicación ha estado al cuidado del sello editorial "Exlibric", de Málaga. La presentación oficial del libro se llevará a cabo durante el XXI Encuentro de Poetas Iberoamericanos a celebrar en Salamanca en el mes de octubre, que se conmemora también los ocho siglos de la fundación de la Universidad de Salamanca.
Los integrantes han nacido entre 1970 y 1985 hasta completar una nómina de 55 autores de diferentes países. Las poetas representadas en la presente antología tienen una presencia destacada, infrecuente en este tipo de publicaciones y con un objetivo, la mujer iberoamericana tiene una voz y una concepción distinta de la expresión poética, una visión del mundo diferente de tal forma que su contribución al panorama poético resulta de trascendental importancia de ahí su presencia especial en esta Antología.
El lector constatará que se incluye la más rica variedad temática, técnica y estilística, como corresponde a una nómina de poetas tan considerable y de procedencia tan diferente.
El índice de autores lo componen:


A
Abril, Juan Carlos (España)
Alonso Cruz, Luis (Perú)
Alonso Sánchez, Diego (Perú)
Alvarado, Javier (Panamá)
Alves Costa, Tiago (Portugal)
B
Belmonte, Luis Enrique (Venezuela)
Blum, Ana Cecilia (Ecuador)
C
Carrión, Ernesto (Ecuador)
Castell, Frank (Cuba)
Cerón, Rocío (México)
Cevallos Perugachi, Javier (Ecuador)
Charry Noriega, Camila (Colombia)
Chávez Casazola, Gabriel (Bolivia)
D
Duarte, Luis Enrique (Nicaragua)
E
Espinosa Guerra, Julio (Chile)
Estrada, Fabricio (Honduras)
Estrada, Lucía (Colombia)
G
Gallo, Paola (Uruguay)
Garcia Pereira, Adriane (Brasil)
García Quintero, Felipe (Colombia)
Gatica Bravo, Marcelo Ismael (Chile)
Ghezzi Solís, Melissa (Perú)
Guerreiro, Sandra (Portugal)
I
Iris, Manuel (México)
López Sandoval, David (España)
Luis Rafael (Cuba)
M
Martínez Clares, José Luis (España)
Martínez Pérsico, Marisa (Argentina)
Masin, Claudia (Argentina)
Méndez, Roxana (El Salvador)
Mendoza, Néstor (Venezuela)
Merino, Ana (España)
Midence, Magdiel (Honduras)
Mills, Alan (Guatemala)
Mussó, Luis Carlos (Ecuador)
Ñ
Ñaupari, Héctor (Perú)
O
Oyuela, Mayra (Honduras)
P
Palomo Pinel, Carmen (España)
Pariso, Valeria (Argentina)392
Parls, Glaem (República Dominicana)
Pastor, Mara (Puerto Rico)
Payeras, Javier (Guatemal)
Pereira, Alberto (Portugal)
Piranesi, Silvia (Costa Rica)
Pólack, Bruno (Perú)
Q
Quevedo Rojas, Aleyda (Ecuador)
R
Rodríguez Leytón, Paura (Bolivia)
Rodríguez Moya, Daniel (España)
S
Santamaría, Gema (Nicaragua)
Secaira Velástegui, Juan (Ecuador)
Solórzano-Alfaro, Gustavo (Costa Rica)
T
Torres, Maggie (Paraguay)
V
Valencia, Ingrid (México)
W
Wolkoff, Gisele Giandoni (Brasil)
Y
Yezzed, Fredy (Colombia)

Completa antología de poesía coordinada por Francisco Alfonso Berlanga Reyes y José Antonio Santano Serrano.

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PAISAJE CON LATIDO por JOSÉ ANTONIO SANTANO


SALÓN DE LECTURA _______
______________ José Antonio Santano


PAISAJE CON LATIDO
Hay regresos que se celebran de forma especial y placentera. Después que el tiempo haya sido como una losa, un estentóreo silencio que anubla la palabra y la encarcela en la prisión del olvido, reconforta comprobar que ese tiempo solo fue eso, una corta parada, un lapsus solo, un paréntesis. Ocurre a veces que cuando creías perdida esa voz que en otro tiempo propició momentos de extraordinaria delectación, un día sin más, vuelve de nuevo, te llega clara y diamantina en forma de libro, y entonces, en ese instante, esa voz ahora convertida en armónicas grafías, recorre todos los silencios del pasado hasta aflorar una indescriptible emoción. 
Gabriel Montes Galdeano
Ilustraciones de Gabriel Montes Galdeano

El libro del que hablamos lleva por título “Paisaje con latido”, siendo el autor de los poemas, 22 en total, José Tuvilla (Guadix, Granada, 1958), y de las ilustraciones, también 22, el fotógrafo almeriense Gabriel Montes Galdeano. Poesía e imagen que se complementan en un juego de espejos donde la belleza del paisaje (Viejas Salinas de Roquetas de Mar) y el latido de los versos nos aventuran en la cotidianidad de los días, en la vida misma de quien mira (fotógrafo y poeta) desde la altura del conocimiento y la emoción que surge de la experiencia, de lo vivido. Ya desde las primeras líneas del generoso prólogo, autoría del también notable poeta Francisico Domene leemos: «Paisaje con latido servirá para que sus viejos lectores por fin nos reencontremos con él y para que los nuevos descubran su extraordinario talento». Y no le falta razón a Domene, esa vuelta a la poesía de Tuvilla nos congratula a quienes sabemos de su inteligencia y su magisterio, a quienes siempre estuvimos a la espera de su luz poética, del fuego de su palabra, esa que alimenta el alma y nos abisma en el silencio de lo invisible hasta estallarnos toda en un segundo. Tuvilla añade a su condición innegable de poeta, otra tan importante como olvidada: el humanismo que impregna su vida, y su obra. Tuvilla es un luchador incansable, un hombre que vive en los hombres y a la luz de otros hombres que supieron alumbrarnos en el difícil camino de la vida. Su poesía está avalada por esa mirada que trasciende en “el otro”, que quiere ser “el otro” en cuerpo y alma para sentirse vivo, de ahí sus continuos logros en el campo de los Derechos Humanos y la Educación para la Paz. 
José Tuvilla
Poemas de José Tuvilla,
 Paisaje con latido

El poeta que es José Tuvilla está más que demostrado con anteriores entregas: “Ritual de la palabra” (1981), “Vibración de la ceniza” (1982) y “Memoria inmóvil (1992), ahora lo revalida en “Paisaje con latido”. Un latido profundo que nos recorre de pies a cabeza cuando leemos los 22 poemas que contienen esta publicación, complementada por la sensibilidad y oficio de Gabriel Montes, que ha sabido captar el alma de los amaneceres. Comienza Tuvilla su periplo poético en este libro por los cuatro elementos de la Naturaleza: Aire, Agua, Fuego y Tierra, en un despertar único que vislumbra el Amor («Si el tiempo permitiera que la luz única fuera aire, aire sería tu voz, / tu latido, la última palmera que el viento acaricia, la hierba exquisita (…) Aire es tu mirada, aire es mi voz que te llama y te dice: “Amor mío”», el Deseo («Allí, en otra hora, en las lindes de la oscuridad, / se abrazó el deseo con afiladísimos y dulces labios, /al amor furtivo», la soledad («Salgo cada día al sendero, entre las sombras que el alba disipa, / y encuentro allí la soledad y la paz que, luego, la urbe me arrebata. / Hoy, todo se alumbra de un rojo intenso, del fuego desnudo», o la tierra en sí misma, la ciudad frente al silencio («En la ciudad, traspasada la línea que marca el sendero, / hoy, las cosas discurren sin quebranto, / como ayer, como mañana, / como las infructuosas estaciones… // Aquí el agua y la tierra…». Pero el poeta camina por el sendero de la vida, ahonda en su realidad diaria y se abstrae para seguir el rumbo de la cálida luz del cielo en su inmensidad, del tiempo que nunca se detiene, que es pasado y presente, futuro innombrable: «Se ha propuesto decidido vencer su récord, / el tiempo todo, la fatiga indomable, / el aire encendido en los pulmones. / Vencer, no ser vencido». El color y la luz de las imágenes provocan en el poeta el amor por la Naturaleza, por el hombre y sus soledades y silencios, en un claro ejercicio de humano sentir, y donde el tiempo es el adversario de la contienda, y la meta el paraíso, el Olimpo: «He aquí al atleta contra el tiempo, en su desafío matutino, / cuando nadie ocupa la línea que la naturaleza prolonga… // Y entonces, sabiéndose extenuado / y frágil, comprenda que ya la juventud le fue arrebatada. / Venimos y nos vamos de este mundo…Sabiéndonos, al final, que no somos nada. (…) Detrás, la urbe se levanta, / se extiende el asfalto y el ruido, en todo su sombra, se eleva». Sin duda, Tuvilla nos devuelve la esperanza en la poesía que crece muy adentro, en las entrañas del lenguaje, en la palabra luz y aureola que nos alerta de los peligros y la vaciedad del hombre, para redimirse en el Amor como única verdad: «Amor mío, deja que la sangre del amor te aceche y te atrape. // Abandónate a mis pasos como yo me abandono a tu latido».
Paisaje con latido

                                       Título: Paisaje con latido
Autores: José Tuvilla / Gabriel Montes
Editorial: Los autores (Almería, 2017)

PAISAJE CON LATIDO por JOSÉ ANTONIO SANTANO


SALÓN DE LECTURA _______
______________ José Antonio Santano


PAISAJE CON LATIDO
Hay regresos que se celebran de forma especial y placentera. Después que el tiempo haya sido como una losa, un estentóreo silencio que anubla la palabra y la encarcela en la prisión del olvido, reconforta comprobar que ese tiempo solo fue eso, una corta parada, un lapsus solo, un paréntesis. Ocurre a veces que cuando creías perdida esa voz que en otro tiempo propició momentos de extraordinaria delectación, un día sin más, vuelve de nuevo, te llega clara y diamantina en forma de libro, y entonces, en ese instante, esa voz ahora convertida en armónicas grafías, recorre todos los silencios del pasado hasta aflorar una indescriptible emoción. 
Gabriel Montes Galdeano
Ilustraciones de Gabriel Montes Galdeano

El libro del que hablamos lleva por título “Paisaje con latido”, siendo el autor de los poemas, 22 en total, José Tuvilla (Guadix, Granada, 1958), y de las ilustraciones, también 22, el fotógrafo almeriense Gabriel Montes Galdeano. Poesía e imagen que se complementan en un juego de espejos donde la belleza del paisaje (Viejas Salinas de Roquetas de Mar) y el latido de los versos nos aventuran en la cotidianidad de los días, en la vida misma de quien mira (fotógrafo y poeta) desde la altura del conocimiento y la emoción que surge de la experiencia, de lo vivido. Ya desde las primeras líneas del generoso prólogo, autoría del también notable poeta Francisico Domene leemos: «Paisaje con latido servirá para que sus viejos lectores por fin nos reencontremos con él y para que los nuevos descubran su extraordinario talento». Y no le falta razón a Domene, esa vuelta a la poesía de Tuvilla nos congratula a quienes sabemos de su inteligencia y su magisterio, a quienes siempre estuvimos a la espera de su luz poética, del fuego de su palabra, esa que alimenta el alma y nos abisma en el silencio de lo invisible hasta estallarnos toda en un segundo. Tuvilla añade a su condición innegable de poeta, otra tan importante como olvidada: el humanismo que impregna su vida, y su obra. Tuvilla es un luchador incansable, un hombre que vive en los hombres y a la luz de otros hombres que supieron alumbrarnos en el difícil camino de la vida. Su poesía está avalada por esa mirada que trasciende en “el otro”, que quiere ser “el otro” en cuerpo y alma para sentirse vivo, de ahí sus continuos logros en el campo de los Derechos Humanos y la Educación para la Paz. 
José Tuvilla
Poemas de José Tuvilla,
 Paisaje con latido

El poeta que es José Tuvilla está más que demostrado con anteriores entregas: “Ritual de la palabra” (1981), “Vibración de la ceniza” (1982) y “Memoria inmóvil (1992), ahora lo revalida en “Paisaje con latido”. Un latido profundo que nos recorre de pies a cabeza cuando leemos los 22 poemas que contienen esta publicación, complementada por la sensibilidad y oficio de Gabriel Montes, que ha sabido captar el alma de los amaneceres. Comienza Tuvilla su periplo poético en este libro por los cuatro elementos de la Naturaleza: Aire, Agua, Fuego y Tierra, en un despertar único que vislumbra el Amor («Si el tiempo permitiera que la luz única fuera aire, aire sería tu voz, / tu latido, la última palmera que el viento acaricia, la hierba exquisita (…) Aire es tu mirada, aire es mi voz que te llama y te dice: “Amor mío”», el Deseo («Allí, en otra hora, en las lindes de la oscuridad, / se abrazó el deseo con afiladísimos y dulces labios, /al amor furtivo», la soledad («Salgo cada día al sendero, entre las sombras que el alba disipa, / y encuentro allí la soledad y la paz que, luego, la urbe me arrebata. / Hoy, todo se alumbra de un rojo intenso, del fuego desnudo», o la tierra en sí misma, la ciudad frente al silencio («En la ciudad, traspasada la línea que marca el sendero, / hoy, las cosas discurren sin quebranto, / como ayer, como mañana, / como las infructuosas estaciones… // Aquí el agua y la tierra…». Pero el poeta camina por el sendero de la vida, ahonda en su realidad diaria y se abstrae para seguir el rumbo de la cálida luz del cielo en su inmensidad, del tiempo que nunca se detiene, que es pasado y presente, futuro innombrable: «Se ha propuesto decidido vencer su récord, / el tiempo todo, la fatiga indomable, / el aire encendido en los pulmones. / Vencer, no ser vencido». El color y la luz de las imágenes provocan en el poeta el amor por la Naturaleza, por el hombre y sus soledades y silencios, en un claro ejercicio de humano sentir, y donde el tiempo es el adversario de la contienda, y la meta el paraíso, el Olimpo: «He aquí al atleta contra el tiempo, en su desafío matutino, / cuando nadie ocupa la línea que la naturaleza prolonga… // Y entonces, sabiéndose extenuado / y frágil, comprenda que ya la juventud le fue arrebatada. / Venimos y nos vamos de este mundo…Sabiéndonos, al final, que no somos nada. (…) Detrás, la urbe se levanta, / se extiende el asfalto y el ruido, en todo su sombra, se eleva». Sin duda, Tuvilla nos devuelve la esperanza en la poesía que crece muy adentro, en las entrañas del lenguaje, en la palabra luz y aureola que nos alerta de los peligros y la vaciedad del hombre, para redimirse en el Amor como única verdad: «Amor mío, deja que la sangre del amor te aceche y te atrape. // Abandónate a mis pasos como yo me abandono a tu latido».
Paisaje con latido

                                       Título: Paisaje con latido
Autores: José Tuvilla / Gabriel Montes
Editorial: Los autores (Almería, 2017)

LETRA Y NUBE DE JUAN ANTONIO BERNIER por José Antonio Santano




LETRA Y NUBE de JUAN ANTONIO BERNIER
El tiempo vuela. Y cuando queremos darnos cuenta de esta contundente verdad estamos atrapados en ella, sin remisión. El tiempo es un hilo invisible que va tejiendo los días y las noches con una seda especial que crece y crece alrededor nuestro y nos envuelve en su soledad de siglos, un silencio que grita a cada instante, seguro de alcanzar el lugar más recóndito del espacio, el vacío que nos muestre el camino hacia lo desconocido. La construcción de un universo personal deviene en profundizar en el misterio del cosmos, atreverse y dejarse sorprender por lo oculto. Nadar a contracorriente hasta quedar exhausto, en el convencimiento de saberse presa del asombro, perplejo ante la extraña mirada del tiempo. Un poco de todo viene a ser el texto que presentamos en esta ocasión “Letra y nube”, del poeta Juan Antonio Bernier (Córdoba, 1976), sobrino del también poeta cordobés Juan Bernier, cercano al Grupo Cántico. Con anterioridad a este poemario ha publicado otros dos, también en la editorial Pre-Textos: “Así procede el pájaro” y “Árboles con tronco pintado de blanco”. En la actualidad compatibiliza poesía y arte al ser gerente de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí. La poesía concebida en “Letra y nube” es minimalista, de versos de arte, caracterizados por la profunda reflexión metalingüística y poética, provocando así una sensación de acabamiento que sitúa al lector en un plano de espejos y laberintos cuya resolución quizá dependa de la palabra, en esa búsqueda por la verdad, su verdad poética, como así se expresa ya desde el comienzo, en este breve poema de la primera parte del libro titulado “El eclipse” : «Para volver en sí, / la luz de la mañana / compuso en la ventana / un paisaje sin mí». El poeta necesita de la breve exposición del pensamiento, de la idea llevada al detalle, para concluir a modo de enseñanza, como si todo pudiera resumirse en un instante solo, en un segundo que perpetuase la existencia. Los poemas, a veces casi aforísticos, entroncan con esa tradición literaria que roza lo filosófico, que trasciende enriquecida por la actitud del poeta en el mundo. Metapoética que aporta valores en su propia simbología, resurgiendo así una nueva fórmula de expresión en esa constante búsqueda de lo desconocido desde la propia realidad material, como así sucede en la tercera parte del libro titulada “La fiebre del oro”, y más concretamente, en el poema “Molino de Rodalquilar”, que nos transporta hasta tierras almerienses: «Perdiz entre el tomillo. / Girando en torno a ella, / las estrellas. // Oculta en el violeta, / eleva a las esferas / su estribillo». Un venir continuo del pensamiento, una ontología latente que predispone al poeta con lo más abstracto en un ejercicio constante de aproximación a aquellas zonas proscritas, pero que Bernier recupera para un discurso poético que sabe de los desiertos y la soledad, como se muestra en este poema, Douane: «Con su paso ondulante, / el sol pule la arena. // Y la duna, desnuda, / recita con la brisa // el áureo trabalenguas / del sol en los trigales», o en este otro, Nocturno: «Quién me cerrará los ojos / cuando esté solo»; concisión y brevedad en la fórmula expresiva como ya habíamos adelantado en líneas anteriores, casi aforística. Una vez más Juan Antonio Bernier visita el espacio ancestral de la palabra, sus campos semánticos en la búsqueda por esa “verdad absoluta” que todo poeta necesita y a la que aspira en todo momento. 
Letra y nube
LETRA Y NUBE DE JUAN ANTONIO BERNIER

Por muy penoso que sea el camino la voz siempre renace. Es como un grito que pervive en todo tiempo, que se mantiene sólido, inalterable. Es la poesía principio y fin, un son que habita en el poeta, en su respiración y en sus pupilas. El pensamiento en su desnudez absoluta, alimento de vida, el viaje último a no se sabe qué clase de eternidad, pero eternidad al fin y al cabo; una luz que rebasa la plenitud de lo infinito, del tiempo en sí mismo y que el poeta advierte en cada sílaba, en cada letra, dejando que a la altura de la nube ascienda y se transforme en voz del aire, hasta el punto de ofrecer una nueva dimensión del “ser” y “estar” en el mundo: «La esfera es imperfecta. / En la flor del granado / fructifica otra esfera»; un viaje a las nubes en su más amplio sentido, hacia el celeste mar del espacio, nube plena en su blanco diamante o en su gris cristalino. “Letra y nube” es un libro tan complejo como interesante, donde la razón del ser se abisma en la vivacidad de la palabra trascendida en un juego de intertextualidades afortunadas al fin que se persigue: la creación de un universo propio. El presente en su dimensión más futurista y la vida en su esencialidad futura: «El fruto se desprende. / La muerte se satura. / La vida vence». Nos muestra Juan Antonio Bernier en este poemario una parte de él tal vez secreta, que germinaba en el tiempo y sus silencios y que hoy y ahora confiesa, como en palabras de R.M. Rilke, con las que cierra este círculo vital de su poesía: «Habla y confiesa. Más que nunca / Se hunden las cosas y desaparecen, las cosas que vivimos, / Porque eso que las empuja y desplaza es un hacer sin imagen».
JUAN ANTONIO BERNIER
JUAN ANTONIO BERNIER

Título: Letra y nube
Autor: Juan Antonio Bernier
Editorial: Pre-Textos (Valencia, 2017)

LETRA Y NUBE DE JUAN ANTONIO BERNIER por José Antonio Santano




LETRA Y NUBE de JUAN ANTONIO BERNIER
El tiempo vuela. Y cuando queremos darnos cuenta de esta contundente verdad estamos atrapados en ella, sin remisión. El tiempo es un hilo invisible que va tejiendo los días y las noches con una seda especial que crece y crece alrededor nuestro y nos envuelve en su soledad de siglos, un silencio que grita a cada instante, seguro de alcanzar el lugar más recóndito del espacio, el vacío que nos muestre el camino hacia lo desconocido. La construcción de un universo personal deviene en profundizar en el misterio del cosmos, atreverse y dejarse sorprender por lo oculto. Nadar a contracorriente hasta quedar exhausto, en el convencimiento de saberse presa del asombro, perplejo ante la extraña mirada del tiempo. Un poco de todo viene a ser el texto que presentamos en esta ocasión “Letra y nube”, del poeta Juan Antonio Bernier (Córdoba, 1976), sobrino del también poeta cordobés Juan Bernier, cercano al Grupo Cántico. Con anterioridad a este poemario ha publicado otros dos, también en la editorial Pre-Textos: “Así procede el pájaro” y “Árboles con tronco pintado de blanco”. En la actualidad compatibiliza poesía y arte al ser gerente de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí. La poesía concebida en “Letra y nube” es minimalista, de versos de arte, caracterizados por la profunda reflexión metalingüística y poética, provocando así una sensación de acabamiento que sitúa al lector en un plano de espejos y laberintos cuya resolución quizá dependa de la palabra, en esa búsqueda por la verdad, su verdad poética, como así se expresa ya desde el comienzo, en este breve poema de la primera parte del libro titulado “El eclipse” : «Para volver en sí, / la luz de la mañana / compuso en la ventana / un paisaje sin mí». El poeta necesita de la breve exposición del pensamiento, de la idea llevada al detalle, para concluir a modo de enseñanza, como si todo pudiera resumirse en un instante solo, en un segundo que perpetuase la existencia. Los poemas, a veces casi aforísticos, entroncan con esa tradición literaria que roza lo filosófico, que trasciende enriquecida por la actitud del poeta en el mundo. Metapoética que aporta valores en su propia simbología, resurgiendo así una nueva fórmula de expresión en esa constante búsqueda de lo desconocido desde la propia realidad material, como así sucede en la tercera parte del libro titulada “La fiebre del oro”, y más concretamente, en el poema “Molino de Rodalquilar”, que nos transporta hasta tierras almerienses: «Perdiz entre el tomillo. / Girando en torno a ella, / las estrellas. // Oculta en el violeta, / eleva a las esferas / su estribillo». Un venir continuo del pensamiento, una ontología latente que predispone al poeta con lo más abstracto en un ejercicio constante de aproximación a aquellas zonas proscritas, pero que Bernier recupera para un discurso poético que sabe de los desiertos y la soledad, como se muestra en este poema, Douane: «Con su paso ondulante, / el sol pule la arena. // Y la duna, desnuda, / recita con la brisa // el áureo trabalenguas / del sol en los trigales», o en este otro, Nocturno: «Quién me cerrará los ojos / cuando esté solo»; concisión y brevedad en la fórmula expresiva como ya habíamos adelantado en líneas anteriores, casi aforística. Una vez más Juan Antonio Bernier visita el espacio ancestral de la palabra, sus campos semánticos en la búsqueda por esa “verdad absoluta” que todo poeta necesita y a la que aspira en todo momento. 
Letra y nube
LETRA Y NUBE DE JUAN ANTONIO BERNIER

Por muy penoso que sea el camino la voz siempre renace. Es como un grito que pervive en todo tiempo, que se mantiene sólido, inalterable. Es la poesía principio y fin, un son que habita en el poeta, en su respiración y en sus pupilas. El pensamiento en su desnudez absoluta, alimento de vida, el viaje último a no se sabe qué clase de eternidad, pero eternidad al fin y al cabo; una luz que rebasa la plenitud de lo infinito, del tiempo en sí mismo y que el poeta advierte en cada sílaba, en cada letra, dejando que a la altura de la nube ascienda y se transforme en voz del aire, hasta el punto de ofrecer una nueva dimensión del “ser” y “estar” en el mundo: «La esfera es imperfecta. / En la flor del granado / fructifica otra esfera»; un viaje a las nubes en su más amplio sentido, hacia el celeste mar del espacio, nube plena en su blanco diamante o en su gris cristalino. “Letra y nube” es un libro tan complejo como interesante, donde la razón del ser se abisma en la vivacidad de la palabra trascendida en un juego de intertextualidades afortunadas al fin que se persigue: la creación de un universo propio. El presente en su dimensión más futurista y la vida en su esencialidad futura: «El fruto se desprende. / La muerte se satura. / La vida vence». Nos muestra Juan Antonio Bernier en este poemario una parte de él tal vez secreta, que germinaba en el tiempo y sus silencios y que hoy y ahora confiesa, como en palabras de R.M. Rilke, con las que cierra este círculo vital de su poesía: «Habla y confiesa. Más que nunca / Se hunden las cosas y desaparecen, las cosas que vivimos, / Porque eso que las empuja y desplaza es un hacer sin imagen».
JUAN ANTONIO BERNIER
JUAN ANTONIO BERNIER

Título: Letra y nube
Autor: Juan Antonio Bernier
Editorial: Pre-Textos (Valencia, 2017)

SEPULTA PLENITUD 2023

SEPULTA PLENITUD 2023
José Antonio Santano

SILENCIO [Poesía 1994-2021] (2021)

SILENCIO [Poesía 1994-2021] (2021)
José Antonio Santano

ALTA LUCIÉRNAGA. 2021

ALTA LUCIÉRNAGA.  2021
JOSÉ ANTONIO SANTANO

Madre lluvia. 2021

Dos orillas.2020

Dos orillas.2020

Marparaíso.2019

Marparaíso.2019

Tierra madre.2019

Cielo y Chanca.2019

Antología de poesía.2018

Antología de poesía.2018
Iberoamericana actual. 2018

Lunas de oriente.2018

La voz ausente. 2017

Humanismo Solidario.2015

Los silencios de La Cava. 2015

Tiempo gris de Cosmos.2014

TIEMPO GRIS DE COSMOS 2014


JOSÉ ANTONIO SANTANO

ISBN: 13: 978-84-942992-3-0

Clasificación: Poesía.

Tamaño: 14x21 cm

Idioma de publicación: Castellano

Edición: 1ª Ed.1ª Impr.

Fecha de impresión: Noviembre 2014

Encuadernación: Rústica con solapa

Páginas: 104

PVP: 12€

Colección: Daraxa












José Antonio Santano, en Tiempo gris de cosmos, articula un canto para “todos los habitantes del planeta”, una poetización de la realidad actual, de “abisales conductas, de feroces decretos / y sentencias, de gritos que enmudecen / en las paredes de las casas / […] / Pienso en la estricta ley del poderoso / clavándose en la carne como lanza, / en sus manos manchadas de sangre, / en sus actos inmorales, / en su oratoria de muerte”.

Por eso se adentra en la libertad de los fondos marinos de los sueños, de la fraternidad, de los bosques, para hospedarse junto al hombre marginado y ser el otro, el padre de los desheredados en un lorquiano romance sonámbulo donde, intertextualizando al granadino, afirma, superando el egocentrismo y derramándose en la otredad, “y yo que no soy yo”, ni su casa, la Tierra, es ya su casa.

José Cabrera Martos

Memorial de silencios. 2014

Memorial de silencios. 2014
He vuelto, como cada día he vuelto para enterrar los chopos bajo el rostro de los sueños, la estela del pasado, el vuelo de las manos en otoño. He vuelto para hundierme en el sonido desgarrado y monótono de teclas que en el blanco papel se precipitan, o en las horas perdidas, en despachos misteriosos de pálidos sillones. He vuelto como siempre, como siempre, para contar silencios de ultratumba -como siempre- que manchan la memoria de sangre y soledades, como siempre. He vuelto como siempre, como siempre, exhausto, con el drama en las pupilas, borracho de naufragios y derrotas.

Estación Sur. 2012

Caleidoscopio.2010

Razón de Ser.2008

El oro líquido.2008

El oro líquido.2008
El oro líquido. El aceite de oliva en la cultura. 2008 VVAA. El oro líquido. El aceite de oliva en la cultura. Edición de José Antonio Santano. Epílogo de Miguel Naveros. Diputación de Jaén. 2008.

Il volo degli Anni.2007

Trasmar.2005

Las edades de arcilla.2005

Quella strana quiete.2004

La cortaera.2004

Suerte de alquimia. 2004

Árbol de bendición.2001

La piedra escrita.2000

Exilio en Caridemo.1998

Íntima Heredad.1998

Grafías de pasión.1998

Profecía de otoño.1994

Canción popular.1986